La decisión del Estado de México: ¿antesala de las presidenciales de 2018?

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De acuerdo con Lorenzo Córdova, Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), las elecciones del 4 de junio se desarrollaron en un contexto económico complejo, socialmente convulso, políticamente dividido y desencantado con la democracia.

Si bien, fueron tres los estados en los que se llevaron a cabo comicios para elegir gobernador: Coahuila, Nayarit y Estado de México; éste último fue el que mayor interés e impacto causó en la opinión pública, dado su peso histórico y electoral.

En este contexto, debemos resaltar que la entidad es una de las pocas en México que no ha tenido alternancia política. Durante los últimos 88 años ha sido gobernada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ha sido la cuna de políticos clave para este partido político, de hecho el presidente Enrique Peña Nieto es mexiquense y fue aquí donde forjó su carrera política.

«En la elección de 2017, el abstencionismo disminuyó en la entidad, logrando la participación del 52,53 % de los ciudadanos»

Respecto al padrón electoral, el estado tiene el mayor número de electores a nivel nacional: 11.404.743 ciudadanos; sin embargo se coloca entre las entidades con menor participación al renovar gobernador; en las elecciones de 1999, 2005 y 2011, la media de participación fue de 45 %. Es decir que menos de la mitad de los mexiquenses son quienes habían elegido a los tres últimos gobernadores. En contraste, en la elección de 2017, el abstencionismo disminuyó en la entidad, logrando la participación del 52,53 % de los ciudadanos.

Este último dato podría responder a que en los años recientes, la población del Estado de México se ha enfrentado a un contexto complejo en el que hay deficiencia en la implementación de políticas públicas, servicios, seguridad, economía o planificación urbana. Al respecto, el colectivo «México Evalúa» indica que entre el primer trimestre de 2012 y el cuarto trimestre de 2016, la entidad únicamente creció un promedio anual de 2,3 %.

El estancamiento económico se ha visto reflejado en el nivel de creación de empleo, ya que para proveer a todos los habitantes que se incorporan al mercado laboral de un empleo formal, se tuvieron que haber creado 166.600 empleos cada año, pero, entre 2012 y 2016, únicamente se generaron –en promedio– 42.164 empleos anuales, aunado a que en 2016, alrededor del 55,4 % de los trabajadores trabajaron en el sector informal.

Estos datos se ven en el porcentaje de mexiquenses que viven en la pobreza: 49,6 % así como en la inseguridad que enfrenta el estado, ya que delitos como secuestros, extorsiones, robo de vehículos y robo con violencia presentan tasas superiores a la media nacional.

Es a partir de esto que, los candidatos a gobernador centraron sus propuestas en temas como la creación de comunidades seguras, la mejora del estado de derecho, el combate a la corrupción, la creación de empleos, el incremento de inversiones, la reducción de la inseguridad, la mejora del transporte público, la cobertura en salud, empoderamiento femenino, inclusión social y defensa al medio ambiente.

El frente a frente de la campaña

El proceso electoral en el Estado de México estuvo marcado por acusaciones y denuncias públicas entre los diferentes contendientes y partidos políticos, algunos afirmaban que sus contrincantes rebasaron los límites de recursos públicos implementados en sus campañas, otros refirieron que se utilizaron recursos de programas federales para beneficiar al candidato opositor; mientras que algunos desmintieron que personas cercanas fueran investigadas por dependencias federales.

De cara a este ir y venir de declaraciones, las encuestas electorales en el Estado de México se caracterizaron por ser sumamente cerradas entre el primer y segundo lugar, sondeos como el del Diario Reforma señalaron que Alfredo del Mazo, candidato del Partido  Revolucionario Institucional (PRI), y Delfina Gómez, de Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) prácticamente llegaron empatados a las elecciones del 4 de junio.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido Acción Nacional (PAN) se ubicaron en un tercer y cuarto lugar. Juan Zepeda, candidato del PRD, fue quien dio la sorpresa  durante la contienda ya que inició la campaña siendo uno de los últimos en las encuestas, pero con el paso de los días, la aceptación del perredista fue en aumento, teniendo un repunte de alrededor de 4 puntos en la intención del voto. Por su parte, Josefina Vázquez Mota, candidata del PAN, no logró conectarse con el electorado, y desde marzo hasta finales de mayo, fue perdiendo  puntos (de 25 a 14,1) hasta ubicarse en un cuarto lugar de preferencia.

Y es que los candidatos del Estado de México se enfrentaron a uno de los procesos electorales más complejos y reñidos en la historia de la entidad.

Los resultados y lo que representa para el futuro cercano

El Programa de Resultados Preliminares (PREP) indica que Alfredo del Mazo del PRI cuenta con el 33,72 % de los votos, mientras que su más cercana contendiente, Delfina Gómez de Morena, registra el 30,82 %.

De confirmarse su triunfo, el PRI habrá ganado su bastión  más importante, pero habrá perdido la tercera parte de su fuerza electoral en la entidad. Mientras que MORENA, al estar a casi tres puntos del virtual ganador, se convirtió en un partido que -de continuar con la tendencia- se convertirá en la segunda fuerza política nacional y uno de los serios competidores a seguir para las elecciones de 2018.

Respecto al triunfo del PRI, analistas indican que el voto duro del partido, aquel que está ubicado en las zonas rurales y la capital del estado, es el que le dio la ventaja para mantener la gubernatura.

En contraste, Delfina Gómez obtuvo el voto urbano, es decir los municipios que forman la zona conurbada de la Ciudad de México. En municipios como Tultitlán, Tlalnepantla de Baz, Coacalco y Cuautitlán Izcalli, que tradicionalmente habían sido dominados por el PRI, los ciudadanos salieron a votar por MORENA. Incluso en dos de tres distritos de Naucalpan, municipio reconocido por ser panista, la candidata de MORENA resultó ganadora.

Además, los votos a favor de Delfina también predominaron en Valle de Chalco, Texcoco y Ecatepec, municipio del cual es originario Eruviel Ávila, el actual gobernador de la entidad.

«El mapa electoral del Estado de México mostró la polarización en el centro del país, en cuya megalópolis se concentra más de 20 % del electorado»

Frente a este escenario, el columnista Raymundo Riva Palacio señala que «el mapa electoral del Estado de México mostró la polarización en el centro del país, en cuya megalópolis se concentra más de 20 % del electorado».

En conclusión, las elecciones del Estado de México mostraron el enojo social frente a la desigualdad, la corrupción y la inseguridad, y es que a pesar del triunfo de Alfredo del Mazo, las zonas urbanas de la entidad experimentaron un cambio en la tendencia del voto al haber elegido a la candidata de MORENA. Por lo que, si el proceso del Estado de México es una antesala de las elecciones federales, en 2018 nos podríamos enfrentar a un nuevo «contexto económico complejo, socialmente convulso, políticamente dividido y desencantado con la democracia», como el que señaló Lorenzo Córdova.

Arie Ellstein es director senior del Área de Asuntos Públicos en LLORENTE & CUENCA México. Anteriormente fue presidente ejecutivo de Legix, firma especializada en Asuntos Legislativos; asimismo ha colaborado en el área de gobierno y asuntos públicos en empresas como MetLife y en consultorías internacionales de comunicación. Es Licenciado en Ciencia Política y Administración Pública; así como en Psicología; además Cuenta con una maestría en Ciencia Política por la Universidad de Essex y otra en Economía Política Internacional por la London School of Economics.

María Gutiérrez consultora del Área de Asuntos Públicos en LLORENTE & CUENCA México. Cuenta con experiencia en materia de asuntos públicos, comunicación estratégica y campañas electorales, así como en análisis político y manejo de crisis. Durante la campaña para las elecciones presidenciales de 2012, participó con el Partido Nueva Alianza, formando parte del cuarto de guerra y del área de comunicación estratégica. Ha apoyado en la generación de productos de inteligencia política y en la redacción de artículos de opinión para medios de circulación nacional como La Jornada, 24 Horas, Eje Central y La Silla Rota. Es periodista egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García y candidata a Maestra en Periodismo Político por la misma institución.

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